CANCIONERO

CANCIONES SCOUTS

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Himno Scout

Salve Scout

Vamos hacia adelante

mil cumbres a escalar.

Ríos, valles y campos

cruzas al pasar,

nada te detiene en tu caminar,

el paso es ligero,

firme la voluntad.

Siempre listos,

somos scouts,

la amistad, la unión,

nuestro afán.

Unidos caminando

las voces sonarán,

miras si al compañero

Puedes ayudar.

Una mano tiende

pronto al recordar,

tus obras son tu meta,

Tu norte la unidad.

Siempre listos,

somos scouts,

la amistad, la unión,

nuestro afán.

Rocíos de la mañana

Saludas al pasar.

Los prados y los mares

y hombres del lugar,

árboles y juncos,

hiedra y rosal

alegran tu sendero,

gozan de tu bondad.

Siempre listos,

somos scouts,

la amistad, la unión,

nuestro afán.

La Flor Roja

La flor roja nos alumbrará;

manada danza alrededor;

cantar lobatos, nuestra ley cantar

con el caer del sol.

"Tú y yo somos hermanos

y del mismo cubil

tu rastro va junto a mi rastro,

mi caza es para ti."

Las lecciones de Baloo escuchad

manada danza alrededor

cantar lobatos, nuestra ley cantar

con el caer del sol.

"Tú y yo somos hermanos

y del mismo cubil

tu rastro va junto a mi rastro,

mi caza es para ti."

Viva la gente

Esta mañana, de paseo,

con la gente me encontré.

El lechero, el cartero y policía saludé.

Detrás de cada ventana y puerta reconocí

a mucha gente que antes ni siquiera la vi.

Viva la gente, la hay dondequiera que vas.

Viva la gente, es lo que nos gusta más.

Con más gente a favor de gente,

en cada pueblo o nación

habría menos gente difícil

y más gente con corazón.

Gente de las ciudades y también del interior,

las vi como un ejército cada vez mayor.

Entonces me di cuenta de una gran realidad:

las cosas son importantes

pero la gente lo es más.

Viva la gente, la hay dondequiera que vas.

Viva la gente, es lo que nos gusta más.

Con más gente a favor de gente,

en cada pueblo o nación

habría menos gente difícil

y más gente con corazón.

Dentro de cada uno hay un bien y hay un mal,

mas no dejes que ninguno

ataque la humanidad.

Ámalos como son mas lucha por que sean

los hombres y las mujeres

que Dios quiso que fueran.

Viva la gente, la hay dondequiera que vas.

Viva la gente, es lo que nos gusta más.

Con más gente a favor de gente,

en cada pueblo o nación

habría menos gente difícil

y más gente con corazón.

Aparecí entre la maleza

Aparecí entre la maleza

a una pantera le di pena

tengo lobos por hermanos

mi madre es la naturaleza.

Ésta es la carta de despedida,

la que Baloo me dijo un día,

cuando la selva deje atrás

esas palabras no se olvidan

Yo te enseñé la ley

y cuando quieras que te ayude no te voy a fallar

pues la sangre que nos une hoy nos vuelve a juntar

dueño de la selva, hoy tu rastro va cambiar.

Yo te visto jugar

entre los blancos guijarros no muy lejos de aquí

cuando solo eras un niño te arrope junto a mí

hoy la luna me ha contado que te vas a despedir.

Y cuéntame como es la aldea

si desde allí se ve una estrella,

dime Baloo si eres mi amigo

y si querrás venir conmigo.

¿Qué es lo que voy a hacer en Ranger?

Habrá una selva de cariño

donde Bagheera, Akela y tú

seáis mis padres adoptivos.

No te voy a fallar

hoy la Tropa puede darte mucha felicidad,

trabajo y aventura Seonee quedo atrás

buena caza y largas lunas y amistad siempre amistad.

Y también es verdad

que en la selva has aprendido la alegría y bondad.

Ahora vete amigo Mowgli y recuerda algo más

¿Quién se atreve a preguntarte el porqué de tu marchar?

El arca de Noé

Un día Noé a la selva fue

y reunió a los animales alrededor de él.

El Señor está enfadado, el diluvio va a caer.

Pero no os preocupéis porque yo os salvaré.

Y estaba el cocodrilo y el orangután,

dos pequeñas serpientes y el águila real,

El gato, el topo, el elefante, no falta ninguno,

tan sólo no se ven a los dos icots.

Mientras los animales empezaron a subir

apareció en el cielo un gran nubarrón.

Y, gota a gota, empezó a llover

y Noé gritó: ¡Señor, sálvame!

Y estaba el cocodrilo y el orangután,

dos pequeñas serpientes y el águila real,

El gato, el topo, el elefante, no falta ninguno,

tan sólo no se ven a los dos icots.

Anikuni

En las noches cuando la Luna

como plata se eleva

y la selva ilumina

y también la pradera,

viejos lobos de la tribu

cantan al gran espíritu,

al espíritu del fuego.

Anikuni, ua, ua, eh

wa, wa, wa, nika, wa, wa, wa,

Ea la uni, mi si ni,

ea la uni, mi si ni,

Anikuni, anikuni, anikuni...

Ya la noche al bosque va sumiendo

en tranquila y solemne oscuridad.

Bajo el manto del oscuro cielo,

ven al fuego scout a cantar.

Dios te salve, esperanza nuestra.

Reina scout, acógenos.

Hoy ponemos nuestras promesas

a tu amparo y protección.

Adiós Scout

Llegado ya el momento

de la separación,

unamos nuestras manos

en un círculo de amor.

Que no nos separemos

de un mismo corazón,

nos une un apretado lazo

que nunca dice adiós.

El follón de los scouts

Viva el follón, viva el follón,

viva el follón bien organizado,

pues, en verdad, pues, en verdad,

al alma en pena hemos de alegrar.

Somos scouts desde hace mucho tiempo

y en nuestras vidas

siempre reina el buen humor

y, al tener que separarnos por patrullas,

entonamos todos juntos

nuestro clásico follón

Viva el follón, viva el follón,

viva el follón bien organizado,

pues, en verdad, pues, en verdad,

al alma en pena hemos de alegrar.

No queremos líos que nos aten,

que nos priven de la libertad.

Sólo queremos estar siempre unidos

cantando y riendo en el follón de los scouts.

Viva el follón, viva el follón,

viva el follón bien organizado,

pues, en verdad, pues, en verdad,

al alma en pena hemos de alegrar.

Te vas de la manada

Te vas de la manada

buscando un nuevo rastro,

que tengas buena caza,

adiós hermano, adiós.

Con él está el Hermano Gris,

no le quiere dejar,

con él están los cuatro,

Baloo, Bagheera y Kaa.

Te vas de la manada

decídselo a la selva,

que tengas buena caza,

adiós hermano, adiós.

Flor de Lis

Oh, flor de lis

dorada, que nació en el pecho

y sin ser sembrada.

Oh, flor de lis,

quién iba a pensar

que tú en mi patria

ibas a triunfar.

Nuestro fundador

por algo escogió

tan hermoso emblema

que a todos unió.

Madre anoche en la trinchera

Caminando por el bosque (laralala)

en el suelo vi que había (uhuhuh)

una carta ensangrentada (laralala)

de cuarenta años hacía. (uhuhuh)

Era de un paracaidista

de la octava compañía

que a su madre le escribía

y la carta así decía:

Madre anoche en la trinchera

entre el fuego y la metralla

vi al enemigo correr

la noche estaba estrellada.

Apunté con mi fusil

al tiempo que disparaba

y una luz iluminó

el rostro que yo mataba.

Clavó su mirada en mí

con los ojos ya vacíos

madre sabe a quién maté

a qué soldado enemigo.

Era mi amigo José

compañero de la escuela

con quien tanto yo jugué

a soldados y trincheras.

Hoy el juego era verdad

y a mi amigo ya lo entierran

madre yo quiero morir

ya estoy harto de esta guerra.

Madre si vuelvo a escribirte

tal vez sea desde el cielo

donde encontraré a José

y jugaremos de nuevo.

Dos claveles en el agua

nunca pueden marchitarse

dos amigos que se quieren

nunca pueden olvidarse.

Si mi cuerpo fuera pluma

y mi corazón tintero

con la sangre de mis venas

yo te escribiría “te quiero”.

Yo he pasado largas noches en la selva

Yo he pasado largas noches en la selva,

junto al tronco perfumado del abeto,

escuchando los rumores del torrente

y los trémulos bramidos de los ciervos.

Yo he bogado en un madero por el río,

he corrido con un potro por los cerros,

he plantado en el peñasco la buitrera

y a los lados los arpones en el piélago.

¡Oh Señor!, tú que ves nuestros anhelos,

por buscarte en tus obras siempre inquietos,

yo te pido que nos lleves de la mano

a la paz de un eterno campamento.

Y, encajado como mísera alimaña,

en la gruta del peñasco gigantesco,

he sentido la grandeza de lo grande

y llorado la ruindad de lo pequeño.

Sí es verdad que no lo encuentran aturdido

en la mágica ciudad por el estruendo,

que se vengan a admirarlo aquí en sus obras,

que se vengan a adorarlo en sus efectos.

¡Oh Señor!, tú que ves nuestros anhelos,

por buscarte en tus obras siempre inquietos,

yo te pido que nos lleves de la mano

a la paz de un eterno campamento.

Lo solemne dice menos que lo humilde,

el reposo dice más que el movimiento,

las palabras hablan menos que los ruidos

y los ruidos dicen menos que el silencio.

¡Oh Señor!, tú que ves nuestros anhelos,

por buscarte en tus obras siempre inquietos,

yo te pido que nos lleves de la mano

a la paz de un eterno campamento.

Soy un scout

Soy un scout de corazón

y acamparé con ilusión.

Al río iré y me bañaré

y nadaré como un salmón

Al monte iré y escalaré

nudos haré con precisión.

Al pueblo iré y me compraré

un gran jamón para comer.

La promesa haré y la cumpliré

cada día haré una buena acción.

Grupo VII - Nervión
Scouts de Sevilla - MSC